Terrorismo publicitario

Quizás conozcas la famosa campaña publicitaria de una tarjeta de crédito en la que vemos en sucesión unos productos y su precio. Al final el eslogan dice que lo que se consigue comprando esos productos no tiene precio.

La versión original en inglés del eslogan dice “priceless”, es decir, que no se puede comprar pagando un precio. Recientemente viendo la nueva remesa de anuncios en TV me di cuenta que tras la palabra “priceless” hay una pequeña “R” en un círculo. Empresas que han gastado grandes sumas de dinero en crear marcas acostumbran a protegerlas registrándolas. Es decir, que no puedes usar el nombre Coca Cola a no ser que sea con permiso. Esa pequeña “R” significa que al igual que la marca Coca Cola, la palabra “Priceless” está registrada.
Parecerá que registrar palabras es llevar las cosas demasiado lejos. Si todos empiezan a registrar palabras pronto vamos a tener que inventar nuevas para poder comunicarnos. Pero el tema no es tan malo como parece a simple vista.

Si otra compañía publicitaria quiere usar la palabra “priceless” en un eslogan puede hacerlo, no está prohibido. Los propietarios del registro pueden entonces denunciar o no denunciar. La teoría económica dice que el comportamiento racional es denunciar, incurriendo en lo que se llama “costes hundidos”: se soporta un coste (el proceso de denunciar y todo lo que acarrea) y de ese modo se manda la señal al mercado que no repararán en gastos para defender su registro. Si alguien quiere usarla va a tener la certeza que le van a denunciar, con lo que se condiciona su comportamiento.

Pero aunque esté claro que van a denunciar, eso no significa que vayan a ganar. El resultado es incierto. Pero para aquellos que quieran usar la palabra es un riesgo demasiado grande puesto que el proceso requiere abogados, plazos, puede ser que deban cancelar la campaña, y seguro que el cliente no va a estar contento. Es básicamente una situación de terror. Porque el objetivo del terrorismo no es destruir inmuebles o vidas humanas, sino hacer sentir inseguridad a la gente, incerteza, impidiendo que tomen decisiones libremente. Si en el borrador de una campaña publicitaria una propuesta usa “priceless” y otra no, lo más probable es que utilicen la segunda, ni que sea para evitarse problemas. Y de este modo, la competencia se ve limitada, no escoge la mejor opción y el terrorismo publicitario consigue su objetivo.

La verdadera razón para los bonus bancarios

George Osborne, el que será ministro de economía británico si ganan los tories en las próximas elecciones, hizo la semana pasada un discurso con algunas propuestas de su programa electoral (en menos de un año tendremos elecciones). Una de ellas es prohibir los “bonus” para los bancos comerciales británicos y claro, en la City se ha montado gorda.

Los “bonus” son los extras que los bancos pagan a los “traders” (los que compran y venden acciones y derivados en nombre de los bancos) como incentivo para que generen más beneficio. Hay quien dice que los “bonus” incentivan a los “traders” a incurrir en altos riesgos a fin de obtener más beneficios, cosa que es buena a corto plazo, pero que puede ser una bomba de relojería.

Así que para proteger a los bancos de ellos mismos, Osborne propone darles “bonus” en forma de acciones del banco en vez de dinero y claro, en la City se ha montado el lio.

Dicen que esto provocaría un éxodo de trabajadores hacia las entidades no británicas, donde si podrían obtener su codiciado “bonus” y que la propuesta demuestra que los políticos no entienden cómo funciona el sector bancario.

No te precipites al juzgar estas afirmaciones. Lo que están diciendo no es que los trabajadores de bancos sean mercenarios dispuestos a venderse al mejor postor. No significa que sean seres miserables sin más lealtad que el vil metal. Tampoco significa que sean holgazanes que sólo van a trabajar si es con la recompensa de los “bonus”. Lo que están diciendo es que los políticos no entienden cómo funciona el sector bancario.

Los banqueros de que hablamos aquí son los “traders”, los que se pasan horas cada día pegados a cinco pantallas de ordenador moviendo millones de libras. No cuentan sus “bonus” en miles sino en cientos de miles.

Y por qué tan alta recompensa aparte de su salario fijo? Porque nadie en su sano juicio querría hacer semejante trabajo, pero alguien debe hacerlo. Por eso la industria ha creado este sistema de retribución basado en los “bonus”, ya que si todo fuera salario fijo ni siquiera tendrían aliciente para levantarse de la cama. No es que los “bonus” les haga más felices, pero por lo menos les permite vivir en Chelsea, ir a trabajar en Porsche, comer en los mejores restaurantes o irse de hotel de cinco estrellas. Como digo no es una compensación, pero por lo menos les permite alegrar ligeramente sus miserables vidas. Si les quitan los “bonus”, quien va a hacer su trabajo por un miserable salario y unas cuantas acciones que quien sabe cuando van a poder vender?

Evidentemente, alguien con la osadez de querer eliminar los “bonus” simplemente demuestra que no tiene ni idea de cómo funciona el sector bancario.

Adios al London Lite: la batalla de los periódicos continua

Estamos presenciando desde hace unos meses una pelea a degüello entre los peródicos de la tarde londinenses. Como en todas las batallas comerciales el lema es “sólo puede quedar uno”. Según los últimos acontecimientos, la batalla está apunto de terminar.

Aquí tienes los dos posts precedentes:

Previamente hemos visto como el millonario Rupert Murdoch, propietario de The Sun, el periódico más leído en UK, creó un peródico de distribución gratuita para la tarde de Londres, el London Paper para (posiblemente) acabar con el Evening Standard, periódico de pago de distribución en Londres y por la tarde, propiedad del mismo grupo que publica el “Daily Mirror”, segundo periódico más vendido en UK. Para contrarestarlo, los propietarios del Standard empezaron a distribuir el London Lite, también en Londres, por la tarde y gratuito. A principios de 2009, hartos de arrastrar pérdidas los propietarios del Standard lo vendieron por la cantidad simbólica de una libra a un millonario ruso ex-agente del KGB, pero siguieron distribuyendo el London Lite. En Septiembre Murdoch decidió cerrar el London Paper.  Dos semanas más tarde, el millonario ruso convertía el Evening Standard en gratuito.

Pues bien, a no ser que los rumores estén completamente equivocados, el London Lite no va a llegar a los turrones, porque los sus editores están considerando muy seriamente acabar con él.

La pregunta ahora es, que ha sucedido?

El London Lite fue creado exclusivamente para ahogar al London Paper. Eso es lo único que está claro, en un movimiento que en economía se llama “costes hundidos”. Pero, por qué nació el London Paper? El hecho de que fuera gratuito era claramente “depredación de precios”, pero su objetivo era hacerse con el dominio de la tarde, o acabar con el Evening Standard? Era repetir la batalla entre el Sun y el Mail? El ruso llegó como parte del plan de Murdoch? El London Paper cerró porque el Lite lo mató o porque ya había cumplido su cometido? Y ahora, por qué se va el Lite? Porque no puede con las pérdidas o porque ya ha cumplido su cometido de eliminar el periódico de Murdoch.

Hace tres años en Londres había un solo periódico por la tarde. En unos días podríamos vovler a la misma situación, con la diferencia que ahora es gratis. Es un ejemplo de libro de con todo: ejemplos de teoría económica, prensa manipuladora, millonarios, rencillas personales, ex-agentes de la KGB…

Pero ojo, esto no ha terminado todavía. Aprovechará el ruso y volverá a hacer el periódico de pago? Quien ha ganado? El ruso? Murdoch? El Daily Mail? El maltrechado público?

Una entrevista!

Pues si, será el clima, será el cambio de hora, será el perfume en el aire pero alguien ha tenido a bien hacerme una entrevista. Quien lo iba  a decir.

Por si estás interesado y/o interesada en lo que me preguntaron, y lo que es peor, en lo que se me ocurrió responder, aquí tienes el link.

Musica al aire libre

Que sentido tiene un festival de música clásica al aire libre a fines de Septiembre, en Londres y por la noche? A qué mente enferma se le puede ocurrir semejante idea? A un visionario, evidentemente. Eso es el Tower Festival.

La cita era para una «stravaganza» de música clásica popular bajo el abrigo del Tower Festival, nada menos que en el foso de la Torre de Londres. Es decir, el típico concierto para aquellos que pretenden saber de música clásica porque queda culto decirlo, pero que jamás podrían soportar un concierto con piezas enteras, tal como las escribió el compositor. Teníamos trocitos de Tchaikovsky,  la apertura de Guillermo Tell, algo de Gershwin, una aria de Puccini y alguna que otra cosa.

Al llegar al terraplén de sillitas (porque llamarlo patio de butacas sería exagerar) un cartel anunciaba que el concierto se había declarado al aire libre y se llevaría a cabo cualquiera que fuera el tiempo. En palabras llanas, si llueve tocará mojarse.

El día había estado despejado y la noche pintaba igual, con lo que la amenaza de lluvia quedaba eliminada, cosa que no era del todo relajante: como ya sabemos por estas latitudes, las noches sin nubes son mucho más frías. Empezada la primera parte, y cuando la luz ya palidecía, una gélida brisa empezó a soplar desde el Támesis (por si no lo sabías, la Torre de Londres está a la orilla del Támesis). El frió se intensificaba, y también el viento. Para cuando la orquesta empezó la segunda parte del concierto, una buena parte del aforo ya se había ido a casa. Menos de una tercera parte de los asistentes se quedaron a escuchar la última pieza, el Can Can de Ofenbach, interpretado de forma energética por las orquesta, intercalando vítores tal como si estuviéramos en un cabaret del Wild West americano. El público frenéticamente aplaudía al ritmo de la música reconociendo el esfuerzo de la orquesta. O era por quitarse el frío que ya llegaba a los huesos? No se.

Un festival de verano tiene que ser algo relajante, y no una brisa helada cortándote la cara mientras estás dos horas sentado en una sillita de madera que se te está clavando en la espalda. Pero ya dicen que todo lo que vale cuesta. Y mientras la mayoría de gente corría hacia el metro o sus coches en busca de un lugar calentito, yo desafié la fría noche, el viento gélido y mis manos aturdidas para remontar el río desde la Torre de Londres hasta el puente de Londres, disfrutando de una de esas escenas que te recuerdan por que vale la pena tanto esfuerzo. Será ese el objetivo del Festival? Ver el Támesis de noche. Quien sabe.

London Bridge II

Distance

Shad Thames

Tower Bridge by night

London Bridge I

Frases útiles en inglés: «leave that with me»

Cómo puedes decir en inglés que tienes la situación dominada, que todo está bajo control, que tu eres el mejor, que el mundo tiene suerte de que tu te vayas a molestar en hacer algo por ellos, pobres mortales? Simplemente di «leave that with me».

Una de las primeras expresiones que aprendes en inglés de la calle (que no es el de los libros, no me cansaré de repetirlo), es «don’t worry». Además, es la letra de una famosísima canción (be happy). Por eso, cuando quieres dar sensación de calma siempre acabas diciendo «don’t worry». Si alguien te pide que hagas algo, siempre le dices «don’t worry» para dar a entender que puede confiar en ti.

Pero eso es sólo de nivel básico. Es como el «no problem». Está bien, pero es flojo.

Lo que tu quieres dar a entender cuando te piden que hagas algo es que la situación está bajo control. Quieres que se den cuenta que sería maleducado siquiera atreverse a dudar. Quieres que se den cuenta de lo afortunados que son de que seas tu, y no otra persona, quien se vaya a ocupar del tema. Otras veces no te están pidiendo que lo hagas, eres tu quien se está apropiando de la tarea. Por alguna razón quieres hacerlo y lo que menos te apetece es que vayan preguntando por qué tienes interés en hacerlo o peor aún, que te digan que ya lo harán ellos. Entonces es cuando sueltas lo de «leave that with me». Es una de esas frases que llamamos «acabador de conversaciones», como overrated.

Literalmente significa «deja eso conmigo», que podríamos traducir libremente como «déjalo en mis manos». Lo importante de la frase es que como tantos otros, es un convencionalismo. Lo immportante no es lo que dice «deja que yo me ocupe», sino lo que la gente va a entender cuando lo escuche. Es importante que el significado vaya acompañado de la correcta inflexión vocal. Debe ser pronunciado acabando en tono grave, con suficiencia. Recuerda que es un acabador.

Hay muchas alternativas, como por ejemplo el «don’t worry ya mencionado», pero ninguna de ellas lleva tanto asociado, ninguna es tan comúnmente usada en todos los ambientes, especialmente el de negocios. Debes usarla no sólo porque te va a conferir esa aura de infalibilidad y arrogancia que debemos perseguir al hacer nuestro networking, sino porque en caso de no usarla se nos va a ver la cara de pardillo. Hay que estar a la altura.

Más frases, palabras y expresiones informales para el día a día en inglés pinchando en el link

Los precios de la vivienda están subiendo?

Los precios de las viviendas suben? Bajan? No importa cual es la verdad, lo importante es que tengas una opinión y parezca que sepas de qué estás hablando. Aquí tienes un pequeño manual de iniciación.

Como ya sabemos, los “expertos” son personas que saben mucho y que tienen la irreprimible necesidad de compartir esa sabiduría con todos nosotros, los comunes mortales. Parece ser que los hay en todos los países, así que no se limita a raza, cultura o religión. Un Mundo Perplejo ha investigado este fenómeno y ha descubierto dos componentes que les confieren halo sobrehumano.

Por un lado está la convicción con que dicen las cosas, cosa que no da lugar a dudas de que saben de lo que están hablando.

Por otro lado tienen una opinión acerca de todo, y tienen la imperiosa necesidad de compartirla por nuestro bien utilizando TV, periódicos, tertulias radiofónicas, revistas especializadas, blogs, Twitter y quien sabe cuantos más canales. El objetivo es doble, ya que nosotros creemos que si no supieran de lo que están hablando no emitirían tantas opiniones, y además, emitiendo tantas opiniones y previsiones alguna acertarán, con lo que se confirmará que realmente son expertos.

En Un Mundo Perplejo también somos expertos, y en la vocación de servicio público que nos caracteriza, queremos que tu también seas experto. Por eso no vamos a decirte lo que va a ocurrir mientras tu simplemente aceptas lo que decimos sino que vamos a darte argumentos para que puedas ser “experto” ante familiares, amigos, conocidos, compañeros de trabajo, fiestas cool o cualquier reunión social a la que asistas.

Hoy te damos argumentos a favor y en contra de que los precios de las viviendas van a subir en los próximos seis meses.

Los precios de la vivienda ya están subiendo: La economía ya ha empezado la recuperación, se ven los “brotes verdes” por todas partes. Esa es una de las causas por las que el mercado inmobiliario ya ha tocado fondo. Mucha gente lo sabe y ahora está apunto de empezar una carrera por ver quien compra antes de que los precios se disparen de nuevo. No sólo eso, las condiciones del mercado hacen que haya pocas viviendas que se añadan a la oferta, lo que está presionando los precios al alza.

Todavía falta una caída importante, y va a suceder a principios de 2010: Los bancos siguen sin dar hipotecas. Es más, nuevas regulaciones están haciendo que sea todavía más difícil obtener una. Cuando a finales de año los propietarios se den cuenta de que sigue sin haber demanda bajaran todavía más los precios. Además, los problemas no han acabado todavía, y habrá más gente que tenga problemas para pagar. Los bancos lo saben y ya han interiorizado ese riesgo en los precios de las hipotecas, lo que las hace todavía más caras, y reduce todavía más la demanda.

Ahora escoge el argumento que quieras. Sobretodo recuerda que hay que decirlo con aplomo, como si supieras de lo que hablas. Y no olvides volver a Un Mundo Perplejo para tener argumentos sobre más temas.

Periódicos de la tarde en Londres: la batalla continua

El lunes por la tarde la noticia no estaba en la portada del periódico, era el periódico en sí mismo: el Evening Standard se estrenaba como periódico gratuito. Si eso no te hace saltar de emoción es que no has seguido «la batalla por la tarde londinense». Cuando hace dos semanas el periódico London Paper cerró pensamos que aquello no era el final de la batalla. Andábamos en lo cierto.

Hagamos un breve resumen de la situación contando única y exclusivamente los hechos. Para valoraciones y teorías económicas puedes leer este post.

  • Durante mucho tiempo el periódico Evening Standard era el único periódico distribuido por la tarde en Londres, y se mantenía en el mercado a pesar de sus pérdidas
  • El 4 de Septiembre de 2006 se distribuye por primear vez el London Paper, periódico gratuito, de tarde y para Londres
  • Una semana antes,  (el 30 de Agosto de 2006) los propietarios del Evening Standard empiezan a distribuir el London Lite: periódico gratuito, de tarde y para Londres
  • A principios de 2009, cansados de las perdidas, los propietarios del Evening Standard venden el 75% a un millonario ruso, ex-agente del KGB, por el precio simbólico de 1 libra; en el paquete no venden el London Lite
  • El 18 de Septiembre de 2009 el London Paper se distribuye en Londres por última vez a causa de las pérdidas (según contaron las noticias)

Así que desde el 21 de Septiembre quedan en la tarde londinense dos periódicos: el Evening Standard, propiedad de un ex-agente del KGB y que se vnde por 50 peniques y el London Lite, periódico gratuito propiedad del mismo grupo editorial que el Daily Mail, segundo periódico más vendido en UK. El London Paper, propiedad del magnate Rupert Murdoch, propietario también de «The Sun«, periódico más vendido en UK, había caído.

Quedaban abiertas muchas preguntas: ¿vendieron el Evening Standard por culpa de la presión del London Paper? ¿Cerró el London Paper porque su rival principal ya había caído? ¿Está el ruso compinchado con Murdoch?

Pues bien, las cosas se han complicado un poco más desde esta semana, porque el Lunes, el Evening Standard se ha convertido en un periódico gratuito.

Es una apuesta arriesgada para conseguir que el periódico genere beneficios. La nueva dirección confía en que al ser gratuito tendrá más lectores, con lo que conseguirá más ingresos por publicidad que compensarán lo que dejen de ingresar por precio. Lo que pasa es que el London Paper también confiaba en la publicidad para generar beneficios y no lo consiguió. Se me ocurren dos teorías.

Una es que el Standard confíe en la fuerza de su marca, ya que es un periódico histórico, y crea que va a conservar a sus lectores, va a atraer a los que acostumbraban leer el London Paper, y al tener también secciones de famosos, TV etc. que es la principal propuesta del London Lite, esperen quitarle lectores.

La otra teoría es que su objetivo sea la destrucción del London Lite utilizando la estrategia de «depredación de precios» igual que el London Lite hizo con el London Paper. Para ello van a incurrir en pérdidas por el tiempo que sea necesario hasta que sean el único periódico.

Hay una tercera teoría. Es algo extraño que Murdoch decidiera acabar con las pérdidas de su periódico justo después que los propietarios del standard decidieran vender. No estará el ruso compinchado con Murdoch? No será que Murdoch forzó con su periódico la venta del Standard, y ahora se retira para hacerle sitio al nuevo propietario? No estará el ruso acabando la faena y dando la estocada al London Lite, derrotando así a los propietarios del Daily Mail, acérrimos enemigos de Murdoch?

Quien dijo que la economía es aburrida?

Diseño para un día de otoño

La cosa anda refrescando por Londres. Otoño ha llegado avisando que quedan meses duros por delante.

Es por eso que Un Mundo Perplejo ha decidido vestirse de colores otoñales. Claro , si estás leyendo esto desde el hemisferio sur, los marrones y ocres no es lo que más apetece ahora mismo. O si, quien sabe!

En cualquier caso, ahí va el nuevo diseño. Espero que te guste.

Poco a poco iré añadiendo algunos retoques aquí y allá.  Por ejemplo, ya puedes seguir mi Twitter (claro, yo también tengo Twitter, que por eso soy cool). Me puedes seguir en http://twitter.com/sirventes, aunque no tengas tus expectativas muy altas.

También tengo la sana intención de aumentar el ritmo de posteo, o sea que me voy a marcar el objetivo de tres posts por semana. Londres da para eso y para más, y además me hace ilusión mostrarte las fotografías que tengo acumuladas de algunos viajes que he hecho. Veremos cómo van esos objetivos.

Pues nada, aquí acaba este post introspectivo.

Si ves alguna cosa que no funciona en el nuevo diseño, deja un comentario.

Gracias por seguir leyendo.

Palabras útiles en inglés: TGIF

Hace unos dias hablábamos sobre la importancia de los acrónimos. Hoy aprenderemos como usar uno especial para los viernes: TGIF

Todo el mundo se alegra cuando llega el Viernes (bueno, excepto aquellos que les toca trabajar en fines de semana). Evidentemente, hay una expresión estandarizada que te permite expresar lo feliz que estás por ser Viernes y que a la vez demuestra tu dominio de la lengua y que eres cool. Así pues en una conversación dirás «Thank God it’s Friday«.

Puede resultar algo extraño que en un país tan políticamente correcto como UK, se pueda nombrar a Dios con tanto desparpajo, pero teniendo en cuenta que no especificas qué Dios, no ofendes a nadie, ni siquiera a los Hindúes, con su panteón de dioses. Los budistas no tienen Dios, pero ellos no se ofenden por este tipo de cosas.

En una conversación podrás decir «Thank God it’s Friday, I am so looking forward to the weekend«.

Con la finalidad de ser eficientes, a la hora de escribirlo lo vamos a convertir en un acrónimo, es decir que «Thank God it’s Friday» se convierte en TGIF. Este acrónimo se puede utilizar en todos los medios escritos, ya sea correo electrónico, SMS, IM, Facebook, Twiter, lo que sea. Al mencionarlo, el lector ya sabe de lo que estamos hablando, con lo que nos ahorramos la explicación. Un ejemplo escrito sería «TGIF, I am going to get pissed tonight«. O «TGIF, my boss is a silly cow«. TGIF permite hacer entender que lo que sea que estás diciendo es porque es Viernes. Como muestra de lo importante que es, si miras en las «trends» de Twitter, verás que TGIF es una de las palabras clave cada Viernes.

Eso si, ve con cuidado con lo que dices, porque el Lunes vas a tener que dar informaciones detalladas de tu grandioso fin de semana.

TGIF, have a good one.

Más frases, palabras y expresiones informales para el día a día en inglés pinchando en el link.