No confundir con «Sociedad de la Información». Traduzco literalmente del Financial Times:
«Información personal y confidencial – reunida desde fuentes tan diversas como el carné de conducir, archivos médicos y tarjetas cliente de supermercado – está siendo compartida sin el conocimiento de la gente, según va a advertir la comisión por la información este martes, en el más reciente intento contra lo que llaman «Sociedad de la Vigilancia» (Surveilance Society).»
«La comisión dice que la creciente complejidad de la red para compartir datos – incluyendo tanto el sector público como privado, y abarcando entidades que van de hospitales a agencias de control de crédito – pueden dificultar que la gente haga valer sus derechos a la hora de averiguar qué información es mantenida sobre ellos.»
En serio? No me diga! Será por eso que estoy recibiendo en casa publicidad no solicitada de tarjetas de crédito y créditos a tipos de interés abusivos, o agencias inmobiliarias con las que yo jamás he tenido contacto. O será por eso que la compañía del agua me cascó un contrato y una factura sin mediar media palabra en base a una información conseguida sin mi consentimiento ni mi conocimiento de la que sacaron conclusiones cuyas consecuencias todavía colean (ver aquí). Y será por eso que me denegaban un teléfono móvil de contrato en base a que no tenían suficiente información sobre mi (ver aquí) y tuve que pagar un depósito, como si fuera un semi-delincuente.
La cuestión es que la protección de datos en UK es precaria, por decirlo de alguna manera.
En España, de donde conozco la Ley más o menos bien, cualquier compañía que va a registrar tus datos debe pedirte permiso (normalmente cuando rellenas datos hay una casilla para decir «no guarden mis datos, no se pongan en contacto conmigo»), y compartir información con terceros está rigurosamente prohibido a no ser que tu lo aceptes. En UK cualquiera puede tener datos sobre ti sin tu consentimiento ni conocimiento y pueden compartirlos a su libre albedrío.
En España las compañías en todas sus comunicaciones contigo deben explicar cómo contactarles para saber qué tipo de información tienen sobre ti, y cómo modificarla o en su caso, borrarla. En UK es problema tuyo saber a quien preguntarle, cosa que deberá hacerse por carta certificada, y probablemente pagando una tasa. En caso que quieras que te eliminen de su base de datos, debes demostrar que el hecho de que te tengan te está produciendo un daño por encima de los límites de la molestia, y la compañía puede negarse a eliminarte, en cuyo caso debes ir al juzgado. Y si en algún momento en el pasado les autorizaste a tenerla, no tienes derecho a queja. Si lo que quieres es que no te manden correo no deseado, puedes pedirlo, y ellos pueden seguir tu solicitud o no. Si se niegan tu única opción es el juzgado. Pero en cualquier caso van a quedarse con tus datos.
Y así es cómo están las cosas, con cámaras en cada esquina, con compañías que pueden compartir tus datos con terceros, teniendo que averiguar a quien mandarle una carta para saber qué información tienen sobre ti, teniendo que pagar por ello, y teniendo que ir al juzgado a reclamar que te quiten de sus bases de datos y eso sólo si demuestras que te está produciendo un daño «beyond annoyance». Cualquiera puede tener tu información privada, y tu ni te enteras. Y todo ello regulado por una ley llamada sarcásticamente «Protección de Datos». Esa es la llamada «Sociedad de la Vigilancia» o «Surveilance Society» imperante en UK.
Ah! pero eso si, aquí no tienen DNI, puesto que es una violación de sus derechos básicos… Que descanso!
Información detallada sobre los derechos del ciudadano referente a sus datos privados y cómo actuar en caso de que creas que te están tomando el pelo en la web de la Comisión para la Información.