Con el móvil en la cama

Según un artículo de CNNMoney, una de cada cinco personas interrumpe el acto sexual para responder el móvil.

Algo va mal.

A estas alturas ya deberían ser cuatro de cada cinco, dado los cubos de dinero que han puesto en márketing. Algo está fallando.

5 cosas que todo compañero de piso debe saber

Cuando nos vamos de casa a compartir piso, hay una serie de cosas que no sabemos. Mi experiencia empieza a ser dilatada, y la observación me ha llevado a encontrar las 5 más importantes, y que parecen ser las más difíciles de descubir. Estas son las 5 cosas que todo compañero de piso debería saber:

1. El interruptor para encender la luz del baño también sirve para apagarla.

2. El rollo del papel higiénico no aparece por generación espontánea. Hay que sacar el vacio y poner uno nuevo.

3. La bolsa de la basura no va sola del cubo al contenedor en la calle.

4. Dar un portazo no es la única manera de cerrar una puerta.

5. Si has usado platos sartenes u otros utensilios y los has dejado en la cocina, y la siguiente vez que los buscas están limpios de nuevo, no es que el jabón es realmente milagroso, sino que alguien lo ha hecho pot ti.

Confirmado: los informáticos viven en otro mundo

Los informáticos son generalmente gente rara. En inglés se les llama «Geek». El término incluye a todas esas personas expertas en algo, como informática, matemáticas, física, que son indescifrables para el resto de la población. El cliché también dice que son gente con dificultades para relacionarse, con lo que se tiende a decir que viven en otro mundo. Pero la verdad es que tienen una doble vida.

El juego preferido de los geeks es ahora Second Life (segunda vida). Es como un inmenso juego de rol por internet. El jugador se registra y escoge una identidad. A partir de entonces su identidad en la «primera vida» desaparece. Luego hay que descargarse el programa que permite conectarse a internet y jugar. Una vez funcionando, se ve a uno mismo desde la espalda, y se va moviendo por el mundo de «Second Life» con el cursor, como en tantos videojuegos.

No hay limitaciones de personalidad para el personaje, y se puede editar la apariencia, la ropa y hasta el género. El juego da la posibilidad de interactuar con gente, ir a fiestas, asistir a clases, reunirse en grupos con intereses similares y hacer cualquier cosa que se supone podrias hacer en el mundo real.

Hasta el punto que hay incluso economía. Uno puede montar su propio negocio, por ejemplo de venta de ropa, o de construcción de casas, propietario de discoteca. Hay también la parte oscura: sexo, apuestas, crimen e incluso promotores inmobiliarios.

Todo ello forma una realidad virtual en que todo lo que se ve, casas, tiendas, ojetos, es generado por los jugadores. Para ello hace falta dinero o la capacidad de escribir lenguaje informático. Ahí es donde entra lo «geek». Aquel que tenga los conocimientos técnicos y el tiempo necesario puede crear para otros y poner un precio, y va sacar el mayor partido del juego. El dinero se puede cambiar por dinero real y a la inversa.

Supongo que mi parte geek se sintió atraida, así que me registré e instalé el juego. Al principio paseas por lo que llaman «Isla Ayuda», en la que aprendes las bases del juego. Sin saber cómo me encontré en una especie de gran cilindro negro que parecia impedirme moverme. Entonces un tipo vestido de negro estilo gótico aparece y dice «Soy la muerte». Moví frenéticamente las teclas de movimiento y conseguí liberarme.

Qué tipo de persona malgasta tiempo y pierde su vista creando un personaje gótico, semejante cilindro para atrapar a los novatos y decir «Soy la muerte». Realmente algunos geeks tienen problemas para relacionarse.

Ringxiety

Un tipo en California con mucho tiempo libre se ha inventado una palabra nueva: "Ringxiety", que se traduciria más o menos como "Ringsiedad".

Cuantas veces, sin una razón aparente, nos hemos echado la mano al bolsillo pensando que el teléfono movil estaba vibrando? O cuantas veces hemos revuelto la maleta, bolso, cartera en busca de un teléfono movil que en realidad no estaba sonando? Pues eso es "Ringsiedad".

En mi opinión, poder darle un nombre a este tipo de cosas es un terrible avance social. Como cuando se inventó lo del "estrés". Antes te decian que no te cuidabas, o directamente, que eran tonterias tuyas. Ahora dices que tienes estrés, quedas de lo más moderno, y encima tienes una buena excusa para desaparecer una semana*. Con eso de la ringsiedad, en vez de quedarte la cara de tonto cuando ves que tu teléfono está en un pacífico modo de reposo, dices "es que tengo ringsiedad, como me llaman tanto…", y quedas de lo más "cool".

Ya puestos, por qué no le dan nombre de una vez a ese otro comportamiento tan conocido? Resulta que llegas al lugar de trabajo, dejas la chaqueta, buscas el teléfono para ver si llevas alguna llamada perdida y te embarga el pánico: te lo has dejado en casa. Te pasas todo el día pensando que precisamente ese día vas a recibir las llamadas más importantes de tu vida, entre ellas una de George Bush invitándote a poner los pies sobre la mesa en su rancho de Texas. Llegas a casa después de un día de sufrimiento, te avalanzas sobre el teléfono, y nadie te ha llamado ni enviado sms, aparte de un mensaje informándote que ahora puedes llamar con un 5% de descuento a todos los números en tu agenda que nunca llamas, aunque sólo es aplicable del minuto 50 en adelante. Alguien que le de un nombre a eso por favor.

*Eso funciona más cuanto más arriba estás de la empresa, claro.